No espere a que ocurra algo malo

Una lápida con un grabado que dice: “En memoria y honor de todos los trabajadores que perdieron la vida en el trabajo”.
El monumento en conmemoración a los trabajadores caídos frente a la sede del Departamento de Trabajo en Washington, D.C.

Cada año, en promedio, decenas de trabajadores sufren lesiones mortales en Idaho, mi estado natal. Entre esas vidas que se perdieron, siete tenían entre 19 y 25 años. Para muchos, el inglés no era su lengua materna. Casi la mitad de estas muertes estuvieron relacionadas con caídas.

Uno de los trabajadores fallecidos era un obrero en su primer día en una obra. Cayó desde el balcón de un segundo piso. El calor extremo también puede haber sido un factor.

Otro trabajador se cayó de un techo metálico que se estaba instalando en una casa de madera.

Un joven de 19 años cayó por una abertura del techo a 29 pies de profundidad mientras realizaba obras de renovación. El empleador dijo que el trabajador nunca faltaba y siempre llegaba temprano.

¿Se imagina lo que viven ahora estas familias? Piense en el inquietante vacío y la nube que oscurece las reuniones familiares.

Estos incidentes no incluyen las innumerables lesiones graves, incapacitantes y costosas que no acaban en tragedia. Como el obrero de 18 años al que le asignaron la limpieza de madera residual; al recoger un trozo de revestimiento sin etiquetar ni asegurar, atravesó el agujero que este tapaba y cayó casi 14 metros al piso de abajo. Este joven vivirá con sus lesiones el resto de su vida.

A menos que usted haya estado directamente implicado o haya conocido a alguien, estas historias pueden parecerle propias de otras personas. Pero, ¿y si fuera usted? ¿O su hijo? ¿Su pareja? ¿Sus padres? ¿Su amigo? Mire a los compañeros de trabajo que están a su lado. Tanto si los conoce bien como si no, ¿qué pasaría si uno de ellos desapareciera mañana? En un abrir y cerrar de ojos. Así, como si nada. Para siempre. Era la voz y las risas de la habitación, que ahora está sumida en el silencio y con un vacío inmenso.

Era la voz y las risas de la habitación, que ahora está sumida en el silencio y con un vacío inmenso.

Es fundamental reforzar la seguridad de todos sistemáticamente, en especial, en trabajos riesgosos como la construcción. Junio es el Mes Nacional de la Seguridad y es un buen momento para asegurarse de que la seguridad sea un valor fundamental en su lugar de trabajo. 

Casi todas las tragedias de las que he sido testigo tienen en común lo siguiente:

  • A menudo, los trabajadores (y los supervisores) solo buscan hacer lo que sea necesario para terminar el trabajo. Esté igual de motivado para hacer el trabajo correctamente y con seguridad. 
  • Hay muy poca planificación o reflexión antes de emprender una actividad de riesgo. 
  • Los atajos se han convertido en un hábito. 
  • Todos los implicados creían (consciente o inconscientemente) que el riesgo era aceptable. ¿Cómo se sentirían ahora ante el riesgo?

Se necesita de un refuerzo continuo para superar la tendencia natural a la autosuficiencia. Esto incluye la creación de una cultura que incluya conversaciones periódicas sobre la seguridad, la capacitación de calidad y la participación de todos en la identificación y subsanación de riesgos en el trabajo. La campaña Safe + Sound de la OSHA cuenta con excelentes recursos que pueden ser de ayuda.

Unos minutos más de planificación y decisión sobre la forma más segura de actuar valen la pena. Las tragedias nos suelen recordar lo que es importante y las medidas sencillas que podrían haberse tomado para prevenirlas. No espere a que ocurra algo malo.

Después de todo, solo intentamos ganarnos la vida, mantener a nuestras familias, construir algo de lo que podamos sentirnos orgullosos y, lo más importante, volver a casa con nuestras familias sanos y salvos. No arriesgue su vida. Tenga cuidado y ponga en práctica la seguridad en el trabajo. Siempre.

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Dave Kearns es director del área de Administración de Seguridad y Salud Ocupacional del Departamento de Trabajo de Estados Unidos en Boise (Idaho). Siga a la OSHA en X/Twitter en @OSHA_DOL y en LinkedIn.