U.S. Department of Labor Blog
La semana pasada, la Junta Nacional de Relaciones Laborales (National Labor Relations Board, NLRB) publicó datos que muestran que las peticiones de elecciones de representación sindical se duplicaron desde el año fiscal 2021: un aumento de 1638 peticiones en el año fiscal 2021 a 3286 en el año fiscal 2024. El presidente Biden celebró la noticia, destacando que “cuando a los sindicatos les va bien, a todos los trabajadores les va bien y toda la economía se beneficia”.
Este aumento de las peticiones de representación sindical se produce en un momento en que las encuestas y otros estudios muestran constantemente que el interés y el apoyo a los sindicatos se encuentran en su nivel más alto de las últimas décadas. Dos tercios de los ciudadanos apoyan a los sindicatos, y el apoyo entre los trabajadores jóvenes es aún mayor. Las investigaciones muestran que más de la mitad de los trabajadores sin sindicato votaría por tener uno en su lugar de trabajo, lo que significa que al menos 60 millones de trabajadores querrían tener un sindicato pero aún no lo tienen debido a las barreras y deficiencias de la ley.
No solo han aumentado las peticiones sindicales, sino también el índice de victorias de los trabajadores que organizan sindicatos, y la afiliación sindical está en crecimiento: ha aumentado en casi 500,000 trabajadores en los dos últimos años.. En los últimos años, casi 50,000 estudiantes que trabajan en universidades han votado mayoritariamente a favor de la creación de sindicatos.
Esta tendencia a una nueva organización es inspiradora, pero ganar unas elecciones sindicales es solo el primer paso: los trabajadores aún deben negociar un convenio colectivo inicial con su empleador. Este proceso puede prolongarse durante meses o años, lo que frustra a los trabajadores y dificulta su capacidad para conseguir aquello por lo que se organizaron: un contrato vinculante con su empleador que establezca salarios, horarios y condiciones de empleo. Solo un poco más de un tercio de las unidades recién organizadas alcanzan un convenio colectivo inicial en un año.
Para animar a las partes a alcanzar un primer acuerdo, la Secretaria de Trabajo interina, Julie Su, ha lanzado el desafío del primer contrato, en el que se invita a las empresas y a los sindicatos recién certificados a alcanzar un convenio colectivo inicial en el plazo de un año. Recientemente, celebró un histórico primer contrato alcanzado en un año entre BlueBird, fabricante de autobuses escolares, y United Steelworkers, y ha desafiado a otras empresas y sindicatos a hacer lo mismo.
El Servicio Federal de Mediación y Conciliación (Federal Mediation and Conciliation Service) ha establecido un programa para ayudar a las partes a alcanzar los primeros contratos, en colaboración con la NLRB. Esta iniciativa se emprendió en relación con el primer Grupo de trabajo de la Casa Blanca sobre Organización y Capacitación de los Trabajadores (Task Force on Worker Organizing and Empowerment), creado por el presidente Biden y presidido por la vicepresidenta Harris. Bajo la dirección de la vicepresidenta Harris, organismos de todo el poder ejecutivo han identificado y aplicaron más de 100 medidas de apoyo a la organización de los trabajadores y la negociación colectiva.
Esta actividad se produce en un momento en que los trabajadores de todo el país están celebrando victorias sin precedentes en la mesa de negociación, logradas con el pleno apoyo de la gestión Biden-Harris, incluidos los acuerdos entre la Alianza de Productores de Cine y Televisión (Alliance of Motion Picture and Television Producers) y SAG-AFTRA, el UAW y los 3 grandes fabricantes de automóviles, la ILA y la USMX, el sindicato de trabajadores hoteleros y los hoteles de Las Vegas y otros.
Como dijo la Secretaria interina Su cuando se anunciaron las nuevas cifras de las elecciones sindicales: “No es casualidad que, bajo la gestión que más favorece a los sindicatos y a los trabajadores, los trabajadores de los Estados Unidos estén ejerciendo sus derechos de organización y tengan la capacidad de exigir lo que siempre han merecido”.
Lynn Rhinehart es asesora laboral sénior experta de la Oficina de la Secretaria.
